𝙀𝙣𝙩𝙧𝙚 𝙨𝙤𝙣𝙧𝙞𝙨𝙖𝙨 𝙮 𝙡𝙖́𝙜𝙧𝙞𝙢𝙖𝙨 𝙚𝙨𝙩𝙪𝙙𝙞𝙖𝙣𝙩𝙚𝙨 𝙙𝙚 𝙡𝙤𝙨 𝙤𝙘𝙩𝙖𝙫𝙤𝙨 𝙗𝙖́𝙨𝙞𝙘𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙚𝙨𝙘𝙪𝙚𝙡𝙖 𝙎𝙖𝙣 𝘼𝙣𝙙𝙧𝙚́𝙨 𝙨𝙚 𝙙𝙚𝙨𝙥𝙞𝙙𝙚𝙣 𝙙𝙚 𝙨𝙪𝙨 𝙥𝙧𝙤𝙛𝙚𝙨𝙤𝙧𝙚𝙨 𝙮 𝙖𝙪𝙡𝙖𝙨
Los estudiantes de octavo año A y B de la Escuela San Andrés vivieron una noche inolvidable marcada por abrazos, lágrimas y sonrisas que reflejaban el orgullo de padres, familiares, docentes y asistentes. Las emotivas palabras de sus profesores y compañeros recordaron los años compartidos entre aulas y recreos, donde nacieron recuerdos imborrables de paseos, anécdotas y aprendizajes.
En representación del alcalde Iván Infante Chacón, la administradora municipal Ruth Aguilar, junto a parte del cuerpo de concejales, desearon a los estudiantes un camino lleno de éxito y sueños realizados.
La despedida estuvo cargada de emociones: los pasillos que guardaron sus secretos, las aulas que vieron sus primeros logros, y el patio que fue testigo de tantas risas quedan atrás, mientras abren las puertas a una nueva etapa. Ahora, con el corazón lleno de promesas y la mirada en el horizonte, se preparan para los desafíos de la educación media, donde el Liceo Bicentenario será el próximo escenario de sus historias.
Una generación que se despide con gratitud y esperanza, llevando en su corazón los valores y enseñanzas de su querida Escuela San Andrés.